jueves, 20 de diciembre de 2018


NOSOTROS O ELLOS Nº 517

La doctrina Cebrowski y la guerra entre países latinoamericanos.

Arthur K. Cebrowski fue un Almirante que sostenía que había que mantener de la manera que fuese posible, la superioridad militar de los EEUU en el mundo. Ello incluía, no sólo la reorganización y modernización permanente de los ejércitos de los EEUU, sino recurrir a todos los métodos posibles para obtener datos que hagan a la “seguridad nacional”.

Bajo esa doctrina se funda, durante el gobierno de George Bush, la organización del más desarrollado complejo internacional de secuestros y torturas donde transitaron más de 80 mil víctimas, muchas de ellas asesinadas.

Durante el gobierno de Obama se incrementa dicha doctrina con la idea de producir los asesinatos mediante el uso de drones y, de ser necesario, de comandos armados. El sistema de represión, tortura y muerte es aplicado en 80 países disponiendo para ello un presupuesto anual de 14 mil millones de dólares.

El asistente de Cebrowski, Thomas Barnett agrega a la doctrina la siguiente elaboración teórica: los EEUU, para mantener su hegemonía mundial, debería dividir al mundo en dos partes; de un lado los Estados “estables” (los miembros de G8 y sus aliados) y del otro el resto del mundo, bautizado como “tanque” de recursos naturales. Y, para que el dominio fuese efectivo, había que destruir sistemáticamente toda la estructura estatal de los países en que se encuentran esos “tanques” de recursos, de manera tal que nadie pudiese oponerse a la colonización y saqueo de los mismos (pensemos en Vaca Muerta o en los acuíferos o en las reservas de litio y otros minerales en el caso argentino)

Barnett es claro: hay que hacer retroceder a esos países a la era del caos. Y agrega: no sólo a los pueblos que ofrecen resistencia sino a todos los países que no han alcanzado “cierto nivel de vida” y… “cuando estén sumidos en el caos… habrá que mantenerlos en él”. Observemos que se impone el caos a través de las guerras generadas (todas) con argumentos falsos y que, una vez iniciadas las contiendas, éstas no finalizan. Desde el 2001 a la fecha ninguna de ellas ha terminado.

La extorsión, la traición, la destrucción de los vínculos sociales en los que se sustenta la unidad nacional en los países “tanques”, deben ser aplicadas con celeridad y, de ninguna manera, permitir que se rehabiliten.

El Pentágono y la OTAN son los que generan y aplican la doctrina Cebroski. Paradojalmente es Donald Trump quien se ha opuesto a continuar su aplicación, pero (donde manda capitán no manda marinero) tuvo que ceder y sólo logró que ambos organismos dejen de asistir al “Estado Califato” de allí que consideren esa acción un triunfo y señalen que “las tropas se retiran de Siria”.

No obstante el terrorismo continúa siendo el arma predilecta del Pentágono quien promueve el asesinato de un presidente electo democráticamente para sembrar el caos en su país. Se trata de Maduro y de Venezuela.

Un artículo que recibimos de Prensa Latina, escrito por Thierry Meyssan, pone al descubierto los planes del imperialismo para América Latina: tres países en la mira: Nicaragua, Venezuela y Cuba (la “troika de la tiranía” la definió el consejero presidencial John Bolton el 1º/11/18 y, un mes después, lo completa el general James Mattis, quien afirma que “Maduro es un déspota irresponsable que tiene que irse”).

La desestabilización comienza en Venezuela con las “guarimbas”, continúan con el fracasado golpe de Estado del 12 de febrero de 2015, con los ataques a la moneda local, con una organizada “emigración masiva” y con operaciones militares desde Colombia. Esa situación se complicará más cuando asuma Bolsonaro y, especialmente, Hamilton Mourao como vice-presidente, militar, cuyo padre jugó un importante papel en el golpe de Estado pro yanqui  de 1964.

Los graves problemas que la guerra ha ocasionado y ocasiona en Medio Oriente, con su secuela de destrucción y muerte, se trasladarán a América Latina.

Y un “destacado papel” juega en este infierno programado el CEO que se encuentra a cargo de la presidencia en Argentina.  Se suma así a la salvaje ofensiva del fascismo en el mundo. No sabe que los traidores a la patria son utilizados por los imperialistas, pero nunca podrán integrar el grupo de esa “raza superior” destinada a tener bajo su mando a los “inferiores”. Sadam Husein, por ejemplo.

El 2019 será un mal año para América Latina y las probabilidades de que Medio Oriente se traslade a este territorio son muy altas. Podemos ver la guerra en directo o luchar para evitar que ese flagelo nos invada.

CENTRO DE INVESTIGACIONES ECONÓMICAS Y SOCIALES (CIEYS) 20/12/18
Los pueblos pagarán muy caro no haber sabido defender su dignidad y soberanía.
Triunfarán, pero el costo y la destrucción pueden ser enormes.

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