De Piamonte llegaron sus
padres campesinos. En su casa hablaban en piamontés. Por eso le decían, en la
escuela, “el gringo”. Ello lo llevó a poseer un carácter tímido y refugiarse en
la lectura más que en los juegos. Lo hacía en su casa, sin luz eléctrica y con
piso de tierra, donde en un rincón armó una pequeña biblioteca.
Fue rápidamente adquiriendo
conocimiento y la seguridad que el conocimiento otorga. Y ya, en el secundario,
afloraba firmemente su carácter de líder y de gran orador, claro y contundente.
Y es así como exterioriza su primera destacada acción en la Escuela de Trabajo
donde cursaba el secundario y había sido, casi unánimemente, elegido presidente
del Centro de Estudiantes: se niega a recibir el diploma por parte de su
autoritario director, hecho que es festejado con aplausos y ovaciones por el
resto de los estudiantes. Con relación a ello diría más adelante “las
victorias más importantes y valiosas son las que se obtienen sobre las propias
debilidades
Nació el 22 de mayo de
1930, hace 82 años, en Coronel Moldes. En 1949 se incorpora a la empresa
eléctrica provincial de Córdoba, ( la SPEC ) como ayudante e inmediatamente
comienza su actuación gremial en Luz y Fuerza. A los 19 años ya era
sub-delegado y a los 20, delegado. A los 22 fue nombrado secretario del cuerpo
de delegados y a los 23 gana las elecciones para la conducción del gremio de la
provincia de Córdoba. A los 24 años, en 1954, es elegido Secretario Gremial del
Secretariado Nacional de la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y
Fuerza. Ese cargo es avasallado mediante una intervención militar.
Nos
estamos refiriendo a AGUSTÍN TOSCO, una de las más destacadas figuras de ese
acontecimiento ejemplar e histórico que sucedió el 29 de mayo de 1969 y que se
denominó EL CORDOBAZO. Agustín lo resumió así: “Fue una rebelión obrero y
popular… surgió de la clase obrera y del pueblo”
La burocracia sindical
peronista, traidora, tras su consolidación en 1973, lo persigue para
eliminarlo. En 1974 intervienen el sindicato y Agustín pasa a la
clandestinidad. Se enferma, pero le es imposible trasladarse a algún hospital o
sanatorio pues corría el seguro riesgo de ser asesinado. Entonces se oculta en
diversas casas de fieles y valientes compañeros, en las sierras cordobesas y en
la ciudad de La Plata donde se traslada disfrazado de mujer.
Muere a los 45 años, en
noviembre de 1975. Una multitud acompaña los restos de ese gigante
revolucionario, amenazado a muerte por la triple A y por los cómplices y
asesinos de la burocracia sindical peronista, quienes más adelante entregarían
a la tortura, el saqueo y la muerte a miles de luchadores obreros, a miles de
delegados de fábricas, la mayoría peronistas y muchos otros comunistas o de
izquierda, a la sangrienta dictadura empresaria-civil-militar que usurpó el
gobierno en marzo de 1976.
Hemos seleccionado cinco preguntas
que le hicieron a Agustín, en una de las tantas entrevistas en las que
participó:
¿Cómo se define a
sí mismo? ¿Cómo cree Tosco que es Tosco? Y responde:
“Bueno,
en el plano personal soy un trabajador que trata de ser consecuente con sus ideales
y su causa. No se darle otro tipo de definición que no sea la de un hombre que
trabaja y lucha al servicio de su clase y de su pueblo”
¿Cómo se
define ideológicamente? Y responde:
“Marxista socialista. Los fundamentos que tengo están elaborados en
base al materialismo dialéctico. En lo político estoy por la unidad de las
fuerzas de distintas tendencias, sin discriminación ideológica, pero siempre
que coincidan con el progreso y la liberación nacional de los argentinos.”
Cuál es la
revolución que usted propugna? Y responde:
“En
realidad, la única revolución posible es la que cambie la propiedad de los
medios de producción y de cambio, ahora en manos de entes privados y
privilegiados, para colocarlos en manos del pueblo. Es la revolución
socialista, con sus características y su desarrollo histórico según las
condiciones naturales de cada país.”
¿…qué es el
cordobazo? Y responde:
“El
Cordobazo es la expresión militante, del más alto nivel cuantitativo y
cualitativo de la toma de conciencia de un pueblo, en relación a que se
encuentra oprimido y a que quiere liberarse para construir una vida mejor,
porque sabe que puede vivirla y se los impiden quienes especulan y se
benefician con su postergación y su frustración de todos los días”
¿Por qué en
Córdoba? Y responde:
“Porque
Córdoba no fue engañada por la denominada “Revolución Argentina”. Córdoba no
vivió la “expectativa esperanzada” de otras ciudades. Córdoba jamás creyó en
los planes de modernización y de transformación que prometieron Onganía,
Martínez Paz, Salimei, Dehesa y luego Borda, Caballero y Krieger Vasena…”
Un gran poeta revolucionario le escribe a este obrero,
intelectual y revolucionario…
Pienso que
va a dolerme, acaso, la memoria
como hoy que he salido de raíz palpitante,
que estaré en una esquina de gente y amapolas,
reconstruyendo todas mis muertes, mis campanas
y que en medio de tanta multitud inocente
volveré a amar un nombre derramado en la sangre,
que construiré una casa de murallas sonoras,
que cantaré a lo loco, que beberé el verano
de manera que todo recobre su potencia
y su flor y su jugo y su tallo y su gracia.
como hoy que he salido de raíz palpitante,
que estaré en una esquina de gente y amapolas,
reconstruyendo todas mis muertes, mis campanas
y que en medio de tanta multitud inocente
volveré a amar un nombre derramado en la sangre,
que construiré una casa de murallas sonoras,
que cantaré a lo loco, que beberé el verano
de manera que todo recobre su potencia
y su flor y su jugo y su tallo y su gracia.
Armando Tejada Gómez - (de Canción del Venidero).
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