NOSOTROS O ELLOS Nº 200

Antes de desarrollar el tema de este número, diremos que destacamos el título del mismo pues hemos llegado al número 200 y, por varias de esas razones que construyen los hábitos y costumbres, celebramos el “número redondo”  logrado.

Por eso agregamos a este número, que trata sobre las bases genocidas, sean militares o mediáticas (pues ambas lo son), una plantilla con los temas de los 200 artículos cuyo número uno lo iniciamos el 4 de agosto de 2013, hace dos años y cuatro días, recordando que, si alguno de ellos les interesa, lo solicita y se lo enviamos.

También queremos señalar que de los 200 números, nunca elaboramos siquiera una simple mentira. Por ejemplo: cuando afirmamos que la mitómana Carrió protege a los narcotraficantes, varios lo consideraban una exageración. En el número 199 lo señalábamos con detalles. Esos mismos detalles fueron reproducidos por C5N en el noticiero de las 18 horas del día 7 de agosto, donde agregaron, además, las escuchas telefónicas que dejan bien en claro el papel del ex policía vinculado familiarmente a Toty Flores, que lleva ya más de 20 años distribuyendo drogas y los candidatos de uno de los grupos de Cambiemos pretenden considerarlo una víctima.

LAS BASES MILITARES DE LOS EEUU EN EL MUNDO

Sobre las bases militares que los EEUU poseen en muchos países del mundo, vamos a señalar que son, aproximadamente, 800. Comenzaron a construirse con la excusa de “contener al comunismo soviético”. Comenzaron al terminar la segunda guerra mundial, cuando el Ejército Rojo derrota a los nazis y sus aliados liberando a Europa y al Mundo del fascismo y se acelera su expansión durante la guerra contra Corea. Toda esa infraestructura se mantiene operativa al día de hoy, con mayor presencia en Alemania, Japón y Corea del Sur. De esas 800 bases, 179 se encuentran en Alemania con más de 50 mil soldados; 109 en Japón, con más de 28 mil soldados y 85 en Corea del Sur con miles de soldados en cantidades no determinadas. El resto de las bases, aproximadamente 484, se encuentran distribuidas en otros 71 países. Las principales rodean Rusia e Irán.

Los “gastos” militares de los EEUU ascienden a 608 mil millones de dólares anuales (u$s 608.000.000.000) y los gastos mundiales alcanzaron la suma  de 1 billón 800 mil millones de dólares (u$s 1.800.000.000.000), ambas cifras de 2014.

El costo del mantenimiento de las 800 bases militares (686 reconocidas y 114 camufladas) es de, aproximadamente 105 mil millones de dólares anuales, equivalentes al costo de construir 2.100.000 departamentos de dos ambiente, por año, totalmente equipados.

Pero lo más trágico es el costo de vida humana, en especial de niños, mujeres y ancianos. Se conocen cifras provisorias, es decir, de las muertes comprobadas: en lo que va del siglo XXI, superan las 800 mil personas. A ello debe agregarse los refugiados que, sea por guerra, catástrofe, persecución política o marginación económica, supera ya los 45 millones de personas. Finalmente agregamos los costos millonarios de la destrucción de bienes materiales y culturales, de patrimonios de la humanidad y la contaminación de amplios sectores de nuestro planeta mediante la utilización de armas prohibidas.

Las guerras son el principal negocio del capitalismo, en especial, de los grandes monopolios, en particular, del complejo industrial-militar de los EEUU que, en estas últimas dos décadas, opera mancomunado con el capital financiero parasitario.

De los 608 mil millones de dólares que anualmente gasta el gobierno de los EEUU, si consideramos que el costo del salario del personal es de un 5%, el 95% restante va a parar a las arcas de los proveedores de equipos, armamentos y sistemas.

Ello acelera la concentración y centralización del capital y genera, por un lado menos ricos más ricos y por el otro más pobres, más pobres. De esa manera, a fines de 2014, la cifra de ciudadanos pobres (bien computados) en los EEUU, superaba los 60 millones. Si consideramos que el país registra 318 millones de habitantes, observamos que un 19% de la población se encuentra bajo la línea de pobreza.

Aumenta la pobreza, aumenta la marginación, aumenta la violencia, aumenta los robos, aumentan los crímenes, aumentan los asesinatos raciales, aumenta la explotación, aumenta el individualismo, etc. En nuestro país aumenta las colas frente a la embajada yanqui. Hay gente que prefiere ir al infierno antes de morirse.

LAS BASES MEDIÁTICAS EN LA ARGENTINA.

Las bases militares han sido creadas para mantener el control sobre territorios que se encuentran bajo la hegemonía de los EEUU, como una prolongación colonial. Actúan de forma directa o indirecta en los conflicto, por medio de tropas o por medio de “asesores”. Son los “lideres de la guerra” y se encuentran presente en gran parte del mundo, un poco más de la mitad. Nunca han ganado definitivamente un “conflicto” y nunca lo van a ganar. Ocupan territorios mientras mantienen presencia activa pero, el mismo día en que se trasladan a otra zona, pierden la que ocupaban. También pierden en guerras abiertas y declaradas, como en Vietnam y Corea, y en guerras “tercerizadas”, como el envío de gusanos mercenarios a invadir Cuba. Sólo pueden provocar destrucción y muerte para agregar millones de dólares de “ganancias” a sus principales operadores. Ellos lo llaman “defender la libertad”.

Las bases mediáticas de los EEUU, en cambio, han resultado ser más eficientes. No están destinadas a ocupar territorios sino a ocupar mentes. Se denominan “medios de comunicación de masas” cuya misión es “formar, informar y entretener” en función de sus objetivos políticos y (muy especialmente) de sus intereses económicos, al “público en general”.

Las bases mediáticas de los EEUU se manejan, en principio, con su propias finanzas, las que provienen, usualmente, de sus “anunciantes” y poseen un ejército de mercenarios (autodefinidos como periodistas o comunicadores sociales) que atacan, lesionan y matan sin derramamiento de sangre en su origen.

Las bases mediáticas de los EEUU no enfrentan a un enemigo sino construyen personas para que cada uno se enfrenten “libremente” al enemigo de ellos: a los que quieren, aún tibiamente, cambiar la sociedad actual por una con mayor justicia social.

La relación con “masas” que no conoce ni intenta conocer es por demás sencilla: la base mediática es un emisor único (“comunicador”) y las “masas” un receptor masivo, heterogéneo y anónimo (“audiencia”).

Si las bases militares son 800 y costosas, las bases mediáticas son decena de miles y se encuentran esparcidas por todos los países y por todos los medios (multimedios).

Mientras las bases militares operan con personal militar de  la potencia extranjera en suelo “ocupado”, y muy a menudo ello produce rechazo por gran parte de la población, las bases mediáticas operan con nacionales cipayos y muy a menudo obtienen, con su prédica, apoyo de una parte de la población.

Las bases mediáticas del imperialismo en nuestro país son numerosas y poderosas. Entre ellas podemos señalar al Grupo Clarín, a La Nación, a Perfil entre las más destacadas. Cada una de esas bases se despliega en bases menores.

Como ejemplo señalaremos al Grupo Clarín que lo integran: diarios (Clarín; Olé; La Razón y Muy); revistas (Ñ; Pymes; ARQ; Elle; Genios; Tiqui-Tiqui; Shop & Co.); coleccionables (diccionarios, atlas, obras bibliográficas, material enciclopédico, fascículos de cocina y otros, guías de viaje y libros de narrativa);  canales de aire (El Trece); canales de cable (Todo Noticia, Volver, Magazine, Metro, Quiero y un red de canales del interior); radios AM (Radio Mitre, AM 810 de Córdoba y una red de radios del interior) FM (La Cien, FM 100.3 de Mendoza y una red de radios del interior) deportes (TyC Sport, Teledeportes, Carburando y otras); cable y acceso a Internet (Cablevisión), proveedor de Internet (Fibertel banda ancha y wi-fi); contenidos digitales y otros (Compañía de medios digitales integradas por ElTreceTV.com, TN.com; Ciudad.com; CienRadios.com; MasOportunidades.com; Confronte.com; ClubCupón.com; Shop1.com; Mundogaturro.com; Todopasión.com; VXV.com; Mublet.com; WelcomeArgentina.com; Interpatagonia.com; TangoCity.com; ViaRestó.com; Yuisy.com; Ubbi y otros y, además: PAPEL PRENSA, COMPAÑÍA INVERSORA DE MEDIOS DE COMUNICACIÓN, DIARIOS Y NOTICIAS, TINTA FRESCA  y con gestión compartida: FERIAGRO; CAMINOS Y SABORES Y ADMITE.

Sólo este ejemplo, de una base mediática de los EEUU conducida por mercenarios locales, contiene más de 800 bases a lo largo de su ramificación en el territorio nacional. Entre los propietarios reales, detrás del biombo, se encuentran, además del complejo industrial militar, los republicanos de los EEUU y Paul Singer junto con otros buitres.

Mostraremos un ejemplo como, estos campeones de la difamación y la mentira, insisten hasta el hartazgo con repetir la misma en distintas formas. Ahora resulta que, la dueña del aguantadero y protectora de los narcos conocidos se considera víctima y amenazada y Clarín lo refleja como una nota final al inicio del período de veda.

Tres balas calibre 38 envueltas en papel, dos guardadas en una caja de color azul, cada una señalizada con iniciales obvias de posibles víctimas y un texto en el que se le pide que deje investigar al narcotráfico, como si el escrito estuviera escrito por un jefe de una organización importante dedicada a la venta de droga

Clarín publica “en exclusiva” las fotos de esos elementos.

Anoche, Elisa Carrió cerró su acto de campaña como precandidata presidencial de “Cambiemos” en el Palais Rouge sabiendo que le habían dejado ese mensaje, que la policía describió como mafioso.

El intento de amedrentamiento incluía también a su precandidato a vice, Héctor “Toty” Flores y a una de su precandidata a diputada por Buenos Aires, Marcela Campagnoli, hermana del fiscal José María, ex investigador del caso Báez.

En el acto de anoche, Carrió no le contó a su audiencia lo que estaba pasando. Clarín pudo saber que la hoy diputada no quiere darle mayor trascendencia al tema, pero sí hizo una denuncia por intimidación pública ante el juzgado de María Romilda Servini de Cubría.

Servini es la magistrada electoral, que además investiga el caso de la efedrina que involucra a funcionarios K, y que esta misma semana sufrió un extraño ataque: uno de los autos de su custodia fue baleado por supuestos ladrones. Al otro día apedrearon el edificio en el que vive Jorge Lanata, en donde también aparecieron balas a pocos metros del lugar.

Servini, Carrió y Lanata denunciaron en los últimos días que el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, estuvo vinculado al tráfico de precursores químicos utilizados para fabricar drogas sintéticas.

Desde ya que no hay ninguna prueba que Fernández esté involucrado en los hechos relatados. Ninguna. Pero observen la nota, el “estilo” utilizado. ¿Alguien cree que esa nota fue escrita por un narcotraficante? ¿O la redactó Carrió? Quien de paso agregó que se ve más flaca para que nos demos cuenta que lo está.

Los daños que pueden hacer los medios son incalculables. Pervierten las mentes débiles de los analfabetos funcionales, es decir, de aquellos que han tenido la posibilidad de estudiar y formarse, de culminar sus estudios e incluso ser profesionales, pero que nunca pensaron con su propia cabeza, repitiendo lo que los medios le incitan a repetir y creyendo firmemente, que ese pensamiento es de su propia elaboración.

Sabemos que nuestro pueblo cuenta con reservas morales suficientes para que estos idiotas útiles de modelados por los medios no puedan torcer el rumbo del camino hacia una sociedad más justa.

   

Oscar Natalichio

CENTRO DE ESTUDIOS ECONÓMICOS Y SOCIALES (CIEYS)

8/8/15